Las Monedas (Patrimonio)

Cortesia Diario Nuevo Dia
Las Monedas

Ahora que esta vigente casi en su plenitud el nuevo esquema monetario que elimino los tres últimos ceros, el mismo no ha logrado redenominar a los pequeños instrumentos de valor y cambio, que rigieron durante mucho tiempo el pago y el vuelto, sobre todo en las modestas bodegas y los primeros abastos que se establecieron en los pueblos y las ciudades de nuestro país. Nos referimos específicamente a la puya, la locha, el medio y el real, este ultimo de carácter dominante en cuanto a expresiones como real y cuartillo, real y medio, tres reales y medio real hasta siete reales.

No tener ni una puya y contar apenas con cuatro lochas eran expresiones relacionadas con la pobreza o las carencias materiales circunstanciales y tener reales significa, y tal vez siga significando, pero en forma relativa, poseer bienes de fortuna sin que se conocieran sus limites y fronteras. Habrá que agregar a esta enumeración la palabra cobres, todavía muy en uso por parte de las generaciones que la aplicaron, con mucho énfasis por cierto en la Maracaibo tradicional.


Las monedas sólidas en verdad estuvieron significadas por el bolívar, la moneda de dos bolívares y la de cinco bolívares, que se conoció como fuerte y que la cotidianidad o el coloquialismos bautizaron también como cara e’palo, hasta que la modernidad los sustituyo por un papel moneda muy frágil, que por contener la imagen de Diego de Lozada, la gente denomino comúnmente como Dieguito.


La puya y la locha han sido reivindicadas a través de la gaita por el papa meneses, pero aunque ahora corran con los mismos números en términos de céntimos, jamás tendrá la fuerza que identifico a aquellas monedas, cuyo destino en muchos casos fueron las alcancías, generalmente tipificadas por un cochinito.